lunes, 17 de junio de 2013

Hay muchas formas de huir.
Podés huir a otro lugar físico. Podés dejar de hacer lo que estás haciendo. Podés abandonar tus actividades. Podés hacer que te vaya mal. Podés dejar de hablar. Podés echar a todos los que te molestan. Podés viajar.  Podés dejar de pensar. Podés dejar de contestar. Podés apagar el celular. Podés cerrar tu facebook. Podés dejar de twittear. Podés decir que 'está todo bien'. Podés preferir no contar. Podés pedir perdón sin sentirlo. Podés enojarte con el mundo. Podés enojarte con una persona. Podés dejar de jugar. Podés no llorar. Podés no contestar el mensaje. Podés decir que 'ya fue'. Podés apagar todas las luces y no pisar ese lugar. Podés volver aunque esté mal. Podés no decirlo. Podés decir que no te importa, cuando si te importa. Podés tener celos. Podés decir que no lo querés. Podés decir que tenes otra cosa que hacer. Podés decir que no lo extrañas. Podés decir que estás enfermo. Podés elegir el silencio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario