viernes, 13 de septiembre de 2013

http://lacausaeficiente.blogspot.com.ar/2013/09/uno.html y bueno, escribo mal pero no me puedo contener.

lunes, 15 de julio de 2013

último

Bueno, esta es mi última entrada. Este blog ya tiene demasiados años y demasiados estilos. A demás de que me considero una pésima escritora, en todos los aspectos, no tengo nada interesante para escribir. Y si hay algo para escribir, no quiero publicarlo. Gracias por leer o no leer. Hasta otro blog.

jueves, 11 de julio de 2013

Si te vas a ir, no hay problema, no te voy a preguntar por qué. Lo único que te faltó fue saludar.


J’ecris pour toi parce que je sais que tu comprends parfaitement tous ce que je dis. C’est le prèmier fois que je t’ecris et serai la dernière. 

martes, 9 de julio de 2013

Cuando escribas un libro, ¿me vas a dejar leerlo?
Cuando uno vive rodeado de fantasmas que construyen insomnio solo quedan dos opciones: morir o escribir. Lo supuse, no lo adiviné. Me veo en el futuro leyéndolo, leyéndome entre líneas. Vos también estás en lo que escribo, estás en mis ejemplos de no comunicación. 
Sabés que hace poco conocí a alguien igual que vos. Intentó quererme, pero no lo logró. No lo dejé en realidad. Él tampoco ayudó, era tan hiriente como vos. Era gracioso, los dos me hacían las mismas observaciones, me miraban igual. Pero él no eras vos. Una vez me dijiste que nuestra relación se basaba en el conflicto: puede ser. Truenos y caos. Luego, paz, el ojo de la tormenta. 

Después de tanto tiempo es la primera vez que voy a dejarme de joder. Esta es la última vez que me quedo sin decir lo que tengo que decir, porque todos salen corriendo antes de que los pueda enfrentar. En un momento quería que me salves. En otro, me pediste que te salvara. Hoy, no quiero nada. 


Somos mierda y cosas buenas

domingo, 30 de junio de 2013

No soporto los extremos. No puede pensarlo todo en términos de blanco y negro. Las gradualidades existen. Lo gradual está relacionado con un punto de vista mucho más complejo, de interacción. Sin puntos medios uno está obligado a la imposición necia e innecesaria. Lo quiero todo o no quiero nada. De todas formas, ya sabíamos que el problema estaba en que tenemos diferentes puntos de vista.

jueves, 27 de junio de 2013

Actos que amenazan a la imagen negativa son aquellos que predican algún deseo de H hacia O  hacia las cosas de O, dando a O razón para pensar que puede tener que realizar alguna acción con el fin de proteger el objeto de deseo de H o dar ese objeto a H.

jueves, 20 de junio de 2013

en todo lo que va de este tiempo, es decir veinte años, solo aprendí dos reglas
1) si contesta puede ser amor / es amor
2) si no contesta es obsesión.

lunes, 17 de junio de 2013

Hay muchas formas de huir.
Podés huir a otro lugar físico. Podés dejar de hacer lo que estás haciendo. Podés abandonar tus actividades. Podés hacer que te vaya mal. Podés dejar de hablar. Podés echar a todos los que te molestan. Podés viajar.  Podés dejar de pensar. Podés dejar de contestar. Podés apagar el celular. Podés cerrar tu facebook. Podés dejar de twittear. Podés decir que 'está todo bien'. Podés preferir no contar. Podés pedir perdón sin sentirlo. Podés enojarte con el mundo. Podés enojarte con una persona. Podés dejar de jugar. Podés no llorar. Podés no contestar el mensaje. Podés decir que 'ya fue'. Podés apagar todas las luces y no pisar ese lugar. Podés volver aunque esté mal. Podés no decirlo. Podés decir que no te importa, cuando si te importa. Podés tener celos. Podés decir que no lo querés. Podés decir que tenes otra cosa que hacer. Podés decir que no lo extrañas. Podés decir que estás enfermo. Podés elegir el silencio.

jueves, 6 de junio de 2013

Por unos minutos pensé que ese día podía desafiar a las leyes del azar y el destino. Tuve que caminar más de lo previsto e idee en mi mente un plan que no podía fallar. Según mi cabeza estábamos destinados a encontrarnos. El camino era perfecto. Derecho por Junín hasta Sarmiento. No podía fallar. Es extraño pero la idea del destino siempre me hace pensar en Borges. Tal vez porque una idea tan absurda y básica como la de que nuestra historia está escrita manejada por una fuerza superior elaborada por un autor de su marnitud, algunos días, me parece increíble. ¿Por qué un tipo como Borges, adorado y leído hasta el cansancio, un tipo que toca temas intelectuales, elige un concepto tan trillado como el destino? No sé pero esa fue la idea con la que tracé mi caminata.
Mientras iba caminando por Junín esquivando los tubos de tela pensaba en cómo iba a ser nuestro encuentro. Mi primera fantasía fue la de un encuentro agradable. Un saludo, una sonrisa picarona. Tal vez un 'que lindo estás' o un 'que bien te veo'. Un '¿cómo anda tu familia?', '¿cómo va la facultad?' '¿seguís nadando?'. Incluso imaginé un abrazo conmovedor, música de fondo. O no, tal vez no, después de como terminó todo la frialdad era el mejor camino. Pensé también en lo que iba a pasar después. ¿Un mensaje? ¿Un algo? O simplemente ver sus fotos con alguna música triste de fondo. Faltan pocas cuadras para llegar a la zona de encuentro: un radio de cinco cuadras por donde él podría circular.
Comencé a ponerme nerviosa. Imaginé lo peor: un beso frío en el cachete, distante, miedoso. Las manos en los bolsillos, lejos de su hombro. Imaginé ese silencio incómodo que tan mal me hace. Imaginé salir corriendo. Y de repente, llegué. Me topé con esa esquina que había visitado tantas veces. De día, de noche, de tarde, de madrugada. Busqué su balcón. ¿Por qué cuando pasamos por la casa de un conocido contamos los pisos y buscamos el balcón? Quería irme. Quise desafiar al destino y me acobardé. No quería encontrármelo. ¿Para qué? Para recordar todo lo que hice mal. No, tenía que caminar rápido. Después pensé que si huía efectivamente iba a encontrármelo en la cuadra paralela. Caminé más rápido. Temblé. Pensé qué cara iba a poner si me lo encontraba. Y paré. El corazón me latió fuerte, las piernas se me entumecieron por la dosis de adrenalina. Ahí lo vi. No estaba solo. Quería correr hacia el otro lado pero era bastante tarde. Venía y no podía evitarlo.
No. No era. Al pasar al lado mio me di cuenta de que esa persona no era ni un centímetro parecido a él. Lo inventé todo. Respiré aliviada. No enfrenté a ningún destino, no jugué con ningún azar. No pude decir '¡qué casualidad que nos encontremos!'. No pasó nada. Aunque me pregunto qué habría pasado si...

martes, 28 de mayo de 2013

Hay días en donde tengo la sensación de que estamos impacientes esperando a que algo nos pase. Como si, a pesar de que ya sabemos que todos nuestros cuentos terminan igual, esperásemos un giro inesperado. Una vuelta en u, un volantazo rápido. Y sin embargo, a pesar de las miles de millones de fantasías que nos gusta pensar, nada sucede.
Mi viejo me dijo el otro día que siempre antes de un examen, a pesar de que él ya sabía que le había ido mal, esperaba el milagro. Le pregunté qué tipo de milagro esperaba si ya sabía que le había ido mal. Y me contestó que no sabía. Creo que quería decirme eso, quería que su cuento terminara distinto. Es como cuando leemos un libro y queremos que ella, la chica hermosa e inteligente a quién pensamos que nos parecemos, termine con él: un pobre tipo pero dulce.
Es triste escribirlo así, tan crudo, disculpen posibles lectores, no soy una buena escritora. Es triste estar esperando que todo sea como mis fantasías. Es triste pensar que tal vez nunca voy a llegar a ser eso que mis fantasías rozan. Es triste. Tal vez es eso lo que nos deprime; libros, películas, series que nos hacen fantasear. Darnos cuenta que con los mismos elementos de los que se compone el mundo se pueden crear esas fantasías que nos gusta decir arte. Es triste que con todos los materiales hagamos una fantasía y no podamos terminar nuestro propio cuento. Es triste pero creo que no cambiaría la adrenalina de saber que nunca va a pasar o que si.

miércoles, 13 de marzo de 2013

la acción de escribir.

Cuando uno escribe, instaura un 'yo'. Al instaurar un yo en el discurso, automáticamente, existe un 'tu'. El yo y el tu no existen sin el 'él'. Ese es el problema de escribir: el otro siempre piensa que él es el tu y que ese 'él' es su problema.

domingo, 10 de marzo de 2013

el eterno retorno de lo mismo

"-¡Qué niebla!...

-¿Te gusta la niebla?

Aquel 'tu' remoto, antiguo, desde mucho tiempo completamente olvidado, con que las dueñas se dirigían a sus esclavos... Sí, también esto había tenido que ser, también esto era bueno.

- Sí, bueno... - dije en voz alta, pero como si fuese monologando. Luego, mirándola, añadí: - Odio la niebla, le temo.

- Por eso la amas. Le temes porque es más fuerte que tú, la odias porque le temes. La amas porque no puedes dorminarla. Puesto que solamente cabe amar lo indomable. "

domingo, 24 de febrero de 2013

¿Cómo saber hasta qué punto las cosas están dichas o hay que decirlas?

lunes, 18 de febrero de 2013

más lento que no sé correr.

lunes, 28 de enero de 2013

¿sabés cuál es la diferencia entre vos y yo? no tengo miedo de quedarme sola.

lunes, 21 de enero de 2013

No soy la más graciosa. No soy la más malhumorada. No soy la más feliz. No soy la más triste. No soy la más rápida. No soy la más lenta. No soy la más inteligente. No soy la más estúpida. No soy la más útil. No soy la más inútil. No soy la más valiente. No soy la más temerosa. No soy la más incrédula. No soy la más creyente. No soy la más divertida. No soy la más aburrida. No soy la h. No soy la b. No soy la más querida. No soy la más odiada. No soy la más extrovertida. No soy la más tímida. No soy fu. No soy fa. No soy nada. No soy todo.

Mi perfil bajo me deja siempre en el limbo.

viernes, 4 de enero de 2013

Tenías razón, mi blog está mal escrito. Pero, esta es la primera vez que no me importa.