Capítulo XXIII

Llegue. Dejé las llaves. Intenté no hacer ruido. Una pasada rápida por el baño, y a la cama. Pijama, comodidad. Primera vuelta. Segunda vuelta. Tercera. Boca arriba. Boca abajo. Contemos. Nada.
Cuando algo te persigue es imposible dormir. Y no dormis hoy, no dormis mañana, tampoco dormiste ayer. Es una boludés. Es obvio, no podés arreglarlo. Un poco de culpa: puede ser. Un poco de angustia: muy poquito, lo suficiente. Nostalgia: bingo.
Esa sensación horrible, entre la boca y el pecho. Eso que quiere salir. Pero no sale más.

Capítulo XXII

Estoy destruida mal. Salir dos noches seguidas con este frió me hizo poronga. El jueves estuvo todo bien, ahora ayer, dios, que espanto. Llegue a mi casa muertísima. Sin embargo, no pude dormir. Me sentía como el orto. Pude dormir después y me levanté a cualquier hora. Me quedé todo el día en la cama, miré una película malísima de Hugh Jackman aunque lo ame, y Glee traducido. Tristísimo. Me duele la espalda no sé por qué, tengo muchos moquitos. Y veo borroso. No sé que onda, me caigo a pedazos.

Capítulo XXI (especial)

Como mi blog no tiene muchas fotos que digamos me copé y quice hacer esto. Me costó mucho subir tantas fotos, así que más vale que lo aprecien. Si están en alguna de esas fotos es porque los concidero importantes y si son importantes y no están es porque no tengo fotos con usted.

Gracias y ese fue mi momento cursi para este año. Espero que les haya gustado.

(les voy a dejar comentar mi hermosa entrada).

Capítulo XX

Los días del amigo se la comen. Mal. Pero mal. Siempre hay alguien o que se queda afuera, o que no le gusta el plan, o que cualquier cosa. Siempre hace frío, y el año pasado teníamos más o menos el mismo clima. Mañana me la voy a pasar a las corridas literal.
En otros temas, me pone mal lo de canto. Hace semanas que no puedo practicar porque estoy llena de mocos. Cada vez que salgo a la calle y me enfrento al frío, vuelvo a mi casa sin fuerzas, es terrible, no sé como hacer.

Aunque el frío mate, las vacaciones están en el aire, semana lejos del voley. ¡Queee felicidad!

Capítulo XIX

Los Domingos por lo general son ultra deprimentes. Desagradables. Monotemáticos. Sin embargo, este fue un Domingo genial. Empecemos porque mañana no hay clases. Y aunque hoy llovió e hizo mucho frío, estuve con mis viejos amigos, que me hacen reír mucho aunque intenten violarme (es mentira de todas formas).
La pasé muy bien, como siempre. Eso me alegro muchísimo el Domingo. Siempre que los veo, vuelvo contenta, no sabría como agradecerles.

Capítulo XVIII

Ojalá fuese fácil desaparecer a la gente con un tonto click.

Capítulo XVII

Hoy iba en el 37, volviendo de canto por la avenida Callao. Me llamó la atención lo lento que iba el bondi, y la gran cantidad de gente que caminaba por la calle con bufandas color naranja flúo como si estuviesen jugando para holanda. Vi un cartel del mismo color que decía ' Si a las familias con mamá y papá' y alguien había escrito 'fachos!' y me reí. Después me enojé. Cómo es posible que la gente sea tan intolerante. No encuentro ninguna razón que sea válida para estar en contra del matrimonio. Dejen ser feliz a la gente, dejen que el mundo pueda tomar su propia decisión. ¿Dios no nos dio libre albedrío? No creo que eso haya sido para nada. ¿Anti-natural? Por favor. El mundo es anti natural y nadie se queja de eso.
Esto me recuerda a mi primer disgusto con la Iglesia. Fue cuando tenía alrededor de 8 años, en catequesis. Discutí con una monja, porque ella me decía que los gays eran felices, y yo le decía que si. Que los conocía y sí eran felices, que si habían elegido eso era porque es lo que ellos querían, nadie los obligó a nada. Nos gritamos un par de cosas, y después de eso, me cuesta entrar a una Iglesia.

Hemos avanzado tanto, no se puede dar un paso para atrás. Hay que abrirse a lo que está por venir!

Capítulo XVI

Me rompe mucho las pelotas la gente que no se pone en el lugar del otro. Siempre me enseñaron que cualquier momento es bueno para pedir perdón y que tratar de sentirse como el otro nunca está de más.
A ver si te pones las pilas.

Capítulo XV

Hace mucho que no sueño algo tan traumático. Fue así. Resulta que un panal de abejas se instala en mi casa. Yo lo miro, lo miro, pero ellas no me molestan y yo no las molesto, a pesar de que les tenga muchisimo miedo. Terror, pánico. De un día para el otro, el panal comienza a crecer. Cada día se hacía más grande. Y DERREPENTE LAS ABEJAS SE HACEN GRANDES Y PELUDAS Y FUE MUY FEO.
Tengo miedo :(

Capítulo XIV

Estoy como hastiada. No sé, estoy incómoda, molesta, quiero tirar todo.
Empecemos porque claro, tengo muestra de canto el 7 de agosto, el mismo día del cumpleaños de belen. La entrada cuesta 20 pesos y canto 3 temas de mierda. Estoy como encaprichada. No le voy a pedir a la gente que venga por 3 temas de mierda, la verdad no me cabe ni un poco, prefiero que no venga nadie. Ya ni ganas de cantar ahi tengo. Encima quiero cantar en algún lugar y no se donde, no sé tocar instrumentos, así que ni siquiera me puedo hacer una propia base. No sé. Estoy de mal humor.