viernes, 29 de abril de 2011

exacto!

Почему это необходимо делать то, чтомне делать?

neeeeeeeeeeeeeeeeeeeeerd

Tengo un enunciado para todos. No es un enunciado cualquiera, es del tipo género discursivo 'pelotudeces que pasan por la cabeza de sofia'. Espero, como emisor no complejo, que todos mis receptores no alocutorios tanto previstos como no previstos, ausentes y no locuentes, puedan entender esto que me pasa en este momento. Mi mensaje es corto y simple, aunque probable y seguramente no compartamos el mismo código. No es una oración o frase abstracta carente de entonación expresiva. Todo lo contrario: es el eslabón que forma parte de una cadena de enunciados de todos los géneros, haciendo hincapié en los textos académicos que todos conocemos, odiamos, aborrecemos. Esta introducción es solo un índice para que mi enunciado final tenga sentido alguno, ya que en mi cabeza, poco lo tiene. El cual refleja en su totalidad mi estado de ánimo.

Me estoy volviendo crazy. Gracias, espero que entiendan.

miércoles, 20 de abril de 2011

Día gris, pensamiento gris.

Los miércoles son días difíciles. Sobretodo porque voy a Montes a las 9 de la mañana. Y las 9 de la mañana es una hora jodida. Jodida enserio. El colectivo va a paso de hombre, lleno, insoportable. Y como para sumar más mierda al tarro, hoy llovía. Pero no esa lluvia de descarga donde parece que el cielo se va a caer bajo tuyo. No. Esa lluvia jodida, como los miércoles, finita, molesta, que estorba, que te mantiene húmedo e incómodo prácticamente el día entero. Esa. El cielo, gris y sobrecargado. Sin embargo, estático.
De pronto, frente a este clima que me daba más sueño que vida, llegamos a Constitución. Invadido de personas, gente corriendo, bicicletas; bueno lo que siempre vemos en la estación. Dando la vuelta, miro hacia lo que es la parte de atrás de la estación. Por un momento, mínimo, un segundo quizás, me sentí en la Inglaterra de 1800 con su famoso smog y en su auge de la revolución industrial. Algo estúpido tal vez, pero realmente lo sentí así. No sé que tipo de influencia tiene esa estación, me gustaría saberlo. Me gustaría estudiar también esas cosas. Como alguien que tiene un padre arquitecto, últimamente (ehm digamos los últimos 5 años), presto más atención a ciertos edificios, aunque puedo definirlos, no puedo clasificarlos. Es una lástima que no haya una carrera donde te enseñen todo lo que querrías saber. Todas esas cuestiones que se te plantean en pequeños momentillos de la vida. Es decir, elegir algo es también buscar una curiosidad latente, supongo yo. Buscar una respuesta a eso que no conoces.
Pero bueno, no me da la cabeza para aprender todo, así que le voy a preguntar al riqui.

miércoles, 13 de abril de 2011

when i'm sixty-four

La verdad que hoy me di cuenta de que lo único que hago últimamente es leer y ver series. Y como leo mucho, les voy a comentar algo que leí hace poco; me llamó la atención y me parece lindo compartirlo (?).

Walter Benjamin, un tipo medio loco, publicó un artículo hace muchos años hablando de la juventud. Caracteriza a los jóvenes de pesimistas, los compara incluso con Hamlet. Pero como Hamlet, estos jóvenes llenos de ideales, necesitan y por lo tanto son pesimistas para poder afrontar todas las miserias del mundo. Sin embargo, esto no los reprime de sus ideales, sino que estos tienen una conciencia del deber. Deben enderezar el mundo, nacieron para eso. Es interesante, porque yo creo que nos define por completo. Todos queremos cambiar el mundo a una determinada edad. Odiamos el sistema (como para no odiarlo), y por un tiempo determinado creemos que todo lo podemos. Nuestros ideales son cambiar el mundo, decir qué está mal y qué bien. Benjamin dice que esta juventud está dormida. Tal como la bella durmiente, está esperando pacientemente que alguien la despierte. Estamos dormidos. Nuestros ideales están dormidos.
Para poder definir algo, hay que oponerlo con otra cosa. Ok. El antónimo de juventud es la vejez. Según este tipo, el signo del envejecimiento en una persona se da cuando se puede ver lo perfecto en lo dado. Una persona es joven mientras no haya realizado su ideal por completo.

Entonces, acá viene mi pregunta. Mi cuestión. Hoy en día, nadie quiere hablar de política, nadie quiere cambiar nada,¿todos estamos bien como estamos? Tan viejos estamos por ser tan conformistas. Caminamos, vemos gente que muere de hambre, la injusticia del sistema. Y nos conformamos con que este mes no subió el boleto del bondi. Tan viejos estamos que permitimos estas cosas. Que no hacemos algo, que no nos movemos. Que no investigamos, que no convertimos pensamientos en ideales. ¿Qué pasa con la 'juventud'? ¿Estamos envejeciendo antes de tiempo? No nos gusta el sistema, pero estamos dormidos, no queremos hacer algo para cambiarlo. Porque hacer algo para cambiarlo significa saber que algo está mal. Despertar. Que todo está mal. Conformarnos es arrugarnos cada día más. ¿Por qué la gente ya no tiene ideales? ¿Estamos todos dormidos? No importa que ideología tengas, si sos de allá, del otro lado. Importa que tengas un objetivo. Un ideal.
Yo quiero seguir siendo joven, no sé vos.

domingo, 10 de abril de 2011

Hoy fue mi primer partido en Club Atlético Palermo. Es difícil entrar a otro lugar después de haber jugado 6 años casi en el mismo lugar. Lo que uno pensaba que era propio, en realidad, es común para todos los equipos. Sin embargo, salí contenta. Feliz. Hace mucho que no jugaba, cuatro meses para ser exactos. Y es re loco, todavía no me acostumbro a los gritos, a los cantitos, a nada. No me acostumbro el hecho de que me miro la camiseta y ya no está el celeste y blanco. De todas formas, me encanta. Me encanta el trato, me encanta la gente. Y me di cuenta, que toda esa mierda que yo pasé, no deberia haber existido. Está mal. Lo que era para mi común, estaba mal. Estoy feliz.

miércoles, 6 de abril de 2011

Ya esta, me cansé de ponerle números romanos a los capítulos. Tengo poco tiempo para escribir. No lo voy a gastar pensando en qué numero sigue después del 1800 en números romanos. Ya fue, perdió toda posible seriedad esto. Borraría todo, pero me da paja, así que lo dejo.

Luego de completar casi mi segunda semana como alumna de la Universidad de Buenos Aires quiero decir la frase 'todos putos'. Enserio.

Cosas buenas del CBC:
- Sos uno más. Sos uno más de los mil quinientos pelotudos que junto a vos se anotaron en este intento de 'ingreso justiciero' que de justiciero nada tiene. Cuando leen la lista de los nombres infinitos vos estas ahí. Esperando a que te nombren. Esperando a ser mencionado al menos una vez. Y cuando crees que dicen tu nombre...no, alguien más se llama Nicola. Ok. Espero al siguiente. Nicola Patrón, Sofia. Y ni siquiera decís presente, levantas la mano, ni te sale la voz.
- Como sos uno más, y realmente a nadie le importa demasiado de donde venis, que haces después, si tenes tiempo de quedarte 5 minutos más, o lo que sea. Podes irte cuando quieras. La libertad de elegir. Si vos ves que te sentas en el aula de semiología, pasaron 45 minutos y el pelado no vino. Listo. Te tomas el palo. Ningún preceptor, ninguna autoridad con voz chillona va a estar persiguiéndote por los pasillos.
- No cursar todos los días es un beneficio. Te da la libertad de tener más disponibilidad de tiempo, y te sacas esa rutina de mierda de encima, la cual venias odiando.
- No tenes historial. El no tener historial es una ventaja. No saben si fuiste o sos un mal alumno. Si te sentas atrás porque te gusta o porque llegas tarde. A nadie le importa tampoco tu historial.
- El bondi vacío. Siempre vacío. El 102 es un lujo, realmente. Son tan pocos los que tomamos el mismo colectivo, que hasta ya los reconozco. Y yo me rio de los pelotudos que se toman el 12 hasta las pelotas.
- Semiología no es un beneficio, pero la verdad es una materia que me copa bastante así que me doy el gusto de ponerla en las cosas buenas. Aparte el profesor me cae bien.
- Parciales domiciliarios en Economia. Listo, no tengo que explicar este punto.

Ahora vamos con las cosas negativas, que son bastantes:

- 40 minutos de viaje. Es un garrón. No te podes dar la posibilidad de llegar tarde, porque sino, cagaste. Y es peor entrar a las 9 que a las 7. Pero claro, las sedes del cbc son una tremenda poronga. Ni hablar cuando tenga que ir a mi carrera.
- Fotocopias que valen oro. Las fotocopias realmente son una patada en el culo. El primer día de pedo pude comprar el apunte de Sociedad y Estado, y lo tuve que comprar sin anillar, ahora pago las incómodas consecuencias.
- Arreglatelas solo amigo. Ningún profesor te dice nada, te tiran la cátedra y buscate el apunte solito. Capaz hay treinta apuntes iguales, pero fijate bien de no comprar cualquier basofia.
- Aulas llenas de gente. Eso me embola, 100 personas de las cuales sabes que después del primer parcial desaparecen la mitad. Quién sabe si vos no sos parte de esa mitad también. Pero desde casa me matan si desaparezco al primer parcial. Así que tengo el valor de criticarlos.
- El pelotudo que asiente con la cabeza. Esos me matan. El profesor capaz está diciendo que se rascó el culo hoy, pero ellos asienten como si viviesen en 'carne propia' cuanto le picaba. Dios.
- La complejidad de los textos. Es terrible. Vos venis bien leyendo a Bobbio, Saussure, o cualquiera de esos miles de hijos de puta que se gastaron en hacer algo tan complicado y rebuscado, que vos te comes la cabeza tratando de entender. Y después viene el profesor y te lo resume en tres palabras. Te queres matar. A eso se le suma la cantidad de los textos. Te hacen sacar una fotocopia y con cara de pícaros de dicen 'chicos eso es solo para el primer parcial! :) '.
- Los sábados. Gracias a Dios todavía no tuve que ir los sábados, pero el solo hecho de pensarlo me aburre, me da sueño y tremenda paja. Y eso que curso de 11 a 13.
- Economía. Materia que odio, que aborrezco y que NO ENTIENDO. No cacho una. Es así, soy un asco para esa materia. Me cuesta horrores.
- Los chistes del profesor de Sociedad y Estado. Está bien, admito que algunos son graciosos. Sin embargo, cuando el chabón se entra a copar demasiado, y repite los chistes pierden gracia, y son las 7 de la mañana hermano, no es hora de chistes.
- Las aulas. Son un asco. Entre la luz que casi que te quema los ojos de la intensidad que tiene, el tamaño de las aulas, y que no corre una puta gota de viento. Es un horror. El olor a chivo que hay en los pasillos es inaguantable, y olvidate de sentarte cerca de un chabón. Moris en el intento. Ni hablar del calor y el cultivo de enfermedades que es eso. No soy muy fifi con eso la verdad, pero el otro dia todo el mundo tosía y había un ambiente como pesado. Me dio asco.
- 4 horas sentado sin parar. La concentración se te dificulta después de la media hora más o menos y las piernas se te atrofian después de la hora. Ya cuando cursas dos materias o más, a la cuarta hora te querés matar y tenés el culo cuadrado.

Por ahora esas son mis quejas con respecto al CBC, y a su funcionamiento. Igual nada, todo sea por formar parte de la universidad. Hay que bancarselo loco, y como me dijo alguien una vez 'siempre hay algo peor'.

Por otro lado, después de una semana de anti sociabilidad, sofía no solo se hizo una compañera sino que también hace letras. Bien ahi la piba.